... y eso que está gordo

Ronaldo hizo de las suyas ayer en el Camp Nou. Su gol -el número 99 en partido oficial con el equipo blanco- sirvió para que el Real Madrid salvara un punto en su visita al feudo del eterno rival. Muy mal se le habían puesto las cosas a los de López Caro después del gol del Barça -un piscinazo de Van Bommel que engaña a Medina Cantalejo- y de la expulsión de Roberto Carlos.

Victor Valdés no hizo ninguna parada durante los 90 minutos. De los tres tiros a puerta del Real Madrid, dos se marcharon fuera y otro sólo pudo recogerlo de la red, tras ser superado por la vaselina de Ronaldo. El mismo al que buena parte de la grada del Camp Nou llamaba "¡gordo, gordo!" pocos minutos antes. Y yo me pregunto como sería la cosa si no estuviera gordo... porque así da pánico verle. La gente en Barcelona no quería reconocerlo, pero la procesión iba por dentro. Volcado el Barça a por la victoria, a más de uno le pasaba por la cabeza la idea de que Ronaldo enganchara otra pelota suelta y se llevara otra vez el gato al agua.

El reparto de puntos no deja contento a nadie. El Barça sigue en la línea de la Liga, pero su juego genera dudas entre los más espcéticos. No meterle un gol a un equipo con serias carencias defensivas y un jugador menos durante 65 minutos es sintomático, al igual que la mala suerte del partido contra el Benfica del martes anterior. El problema no es que la pelota no quiere entrar, sino lo que sucede cuando no entra. Por su parte, el Real Madrid no consigue vengar la afrenta sufrida en el Bernabeu, y el punto conseguido le vale para poco, por lo menos de momento. Quizás a final de Liga lo agradezca en su lucha por la segunda plaza.

PD: Veremos como acaba el tema de la expulsión de Roberto Carlos. Medina Cantalejo asegura que le llamó "mierda", y que por eso le mostró la roja directa. Ronaldo ironiza con el tema, asegurando que el árbitro "es un fenómeno" por haber escuchado el insulto entre los gritos de casi 100.000 espectadores.